2 de febrero de 2010

°° prohibida °°


Entro con cautela y me abrigo a su costado
Le he amado desde aquel instante en que advertí
La mirada mía entre sus ojos tan prudentes como calmos

Aun así yo sin saber lo que es amar
Me disperso en su presencia a la faz de dos caminos
El beso cálido y sosiego
Conllevado cada noche a la lujuria contenida entre mi pasión y su intranquilidad.

Lo miro y desvarió,
Muero por tenerle entre mis brazos
Exaltar una a una aquellas bajas pretensiones
Desde siempre han sido sometidas, Recubiertas en su cuerpo bajo piel
Estrecha línea entre lo lícito y lo eternamente inadvertido
La locura por amarle y saberle suyo, inaccesible a mí querer.

Ya antes ha rozado con sus manos, mi cuerpo que subsiste aun prematuro
Y saciado sus instintos en mi vientre
Que no alberga más que el consuelo y desencanto de mis faltos años.
En la suma de los suyos he encontrado aquel resabio
El que reste la inocencia que me aqueja
Al contar de los minutos que en su extenso transitar
No han logrado alcanzar mis tan imperceptibles pasos.

Aun escucho de sus labios enunciar que el amar no es para mí
Más que el capricho inoportuno que no logro descifrar
Y desgarro mi garganta con un grito sin retumbo
Que demuestre usted lo sabe
Es mi pecho y en mi lecho donde su cordura ha perdido
Y mis besos vírgenes y ausentes que a su libido reclusa
Incitan a vaciar de aquel viejo y roído costal.

Ha dejado en descubierto la mujer
Ostentando por mi cuerpo sin pensarlo
Crea usted cuando le digo no es tortura el escucharlo
Como más lo es el saber que ha de marchar hacia otros brazos
Su presencia señor mío, aquí a mi lado
Más que una incidente insubstancial, Perpetúa siendo una ocasión estacional

Ni en su mente y su espacio me ha logrado consumar
Es conmigo no obstante y lo niegue el antojo de mis años
Lo que brinda apetecida absolución de su ya conocida insuficiente realidad.

No es en ella ni en su cuerpo es mi alma y mis sigilos
No es ella ni su hogar es el fruto inmaduro en mis entrañas
Que le incita a devorar lo que en externo pareciese ser la niña
Y por dentro simplifica el ardor que aunque lo angustia no pretende nunca revelar.




Mar.



1 comentarios:

Anónimo dijo...

Simplemente una palabra para describirlo "Perfecto"

Me encanto mucho lo que plasmas en este escrito, sin perder lo abstracto de ti con una hilada de imagenes tan reales alcance a percibir.

Cita:

"Aun así yo sin saber lo que es amar
Me disperso en su presencia a la faz de dos caminos"

Me encanta esta parte, donde el ser humano corre riesgos ya que la vida esta llena de ellos, con la idea de encontrar algo se arriesga, ojala y esa decision la lleve a saber de una vez que es amar. suerte..

Muy bueno
GGA